En la provincia de Cáceres, flanqueado por Portugal y Las Hurdes, San Martín de Trevejo se acomoda en la Sierra de Gata y se rodea de olivos, pinares, castaños y robles. Es uno de esos pueblos de Extremadura que ha sido capaz de mantener intacta su esencia y su arquitectura popular. Precisamente por eso ha sido declarado Bien de Interés cultural con la categoría de Conjunto Histórico.
Por eso, una de las cosas que hacer en San Martín de Trevejo (la primera, para más señas) es dejarte llevar a lo largo y ancho de su anatomía, disfrutando de sus calles estrechas, empinadas y llenas de encanto. Disfrutar de la sencilla armonía de sus casas tradicionales (con menos de dos alturas) con escaleras exteriores de granito que sirven de acceso directo entre la calle y el primer piso, dándoles un aspecto curioso y peculiar. Este tipo de escaleras se construían porque la planta baja solía utilizarse como bodega y cuadra.
Qué hacer en San Martín de Trevejo: rincones para no olvidar.
Por su categoría de conjunto histórico, ya puedes imaginar que San Martín de Trevejo no te va a decepcionar. Mientras vagas por sus rincones, estos son los sitios a los que debes dirigir tus pasos:
- Iglesia parroquial de San Martín de Tours.
- Plaza Mayor porticada y monumental torre campanario.
- En todo el casco urbano verás sus casas típicas hechas de adobe y piedra.
- Piscina natural (con una amplia playa pero también zonas de sombra).
- Convento de San Miguel.
- Casas-palacio diseminadas por el casco antiguo.
- Almazara del siglo XII.
La historia de este pueblo cacereño es muy amplia y ha ido dejando tesoros que hoy aún podemos contemplar. Los restos más antiguos encontrados y a disposición del visitante, llevan esperándote allí desde finales de la Edad de Bronce y principios de la Edad del Hierro. Se trata de estelas funerarias, aras e ídolos.
Si te das una vuelta por sus inmediaciones podrás encontrar también una buena cantidad de chozos, antiguas construcciones que servían de refugio a los pastores y agricultores. Son de planta circular y están hechos de piedra y madera.
Por último, merece la pena que te acerques a la localidad de Gata, cerca de San Martín, para conocer La Torre de la Almenara, una espectacular torre defensiva de forma pentagonal, situada en lo alto de un cerro y que, a pesar de encontrase en un notable estado de abandono (lo cual le confiere un mayor romanticismo) te ofrecerá unas vistas realmente privilegiadas de toda la zona.
Naturaleza y cultura con personalidad propia.
Otra de las peculiaridades de San Martín de Trevejo es que sus habitantes hablan una lengua propia, conocida como “a fala”. Lo cierto es que no se sabe exactamente cuál sería el origen de esta lengua, aunque las teorías con más apoyos suelen incluir mezclas e influencias del portugués, el asturleonés y el gallego.
Por otra parte, su situación en la preciosa Sierra de Gata dota a San Martín de Trevejo de un precioso entorno natural que podrás recorrer a través de varias rutas para disfrutar del senderismo, entrar en contacto con la naturaleza y disfrutar de la belleza y la tranquilidad. Por ejemplo:
- San Martín de Trevejo – Puerto de Santa Clara (9,45 km).
- San Martín de Trevejo – Elijas (13, 54 km).
Ahora que ya puedes planear sin problema qué hacer en San Martín de Trevejo, no tienes excusa para disfrutar de un lugar que te hará sentir la auténtica esencia del turismo rural.