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Qué hacer en Zafra.
Que hacer en Zafra, Zafra tiene ese encanto y ese carácter único, abierto, mestizo y hospitalario, que confiere el hecho de ser un cruce de caminos, un nudo de comunicaciones. Es uno de los municipios más importantes de Badajoz y se asienta en un llano al pie de las escarpadas rocas que forman la Sierra de Castellar. Ese algo tan distinto y singular que tiene, convirtió a Zafra en una de las 20 elegidas para formar parte de la película documental Pueblos de Europa, un honor que comparte con otra población extremeña: Hornachos.
Desde la Edad Media la importancia comercial y ferial de Zafra ha ido configurando una ciudad orientada al intercambio, algo en lo que ha tenido mucho que ver su posición en la antigua calzada romana de la Vía de la Plata.
Si quieres saber qué hacer en Zafra, esto es lo que te recomendamos para captar de la mejor forma posible su esencia.
¿QUÉ HACER EN ZAFRA?
Zafra fue declarada Conjunto Histórico Artístico de Interés Nacional en 1965 y eso ya te da la primera y más valiosa pista sobre lo que te espera. Paseando por su monumental casco antiguo te sentirás de alguna manera en una ciudad antigua y moderna, donde la tradición y la apertura conviven pacíficamente en sus preciosas calles de aspecto medieval.
Alcázar-palacio de los Duques de Feria.
Sin duda es el monumento más emblemático de Zafra y uno de los que se quedará en tu memoria como más distintivo de su identidad.
Fue construido entre 1437 y 1443 y, más que un baluarte defensivo, se trata de una residencia señorial, más pensada para proyectar belleza y majestad.
En torno al alcázar-palacio se articula la muralla y toda la zona antigua de Zafra, con la habitual forma de caparazón de tortuga que presentaban las fortificaciones musulmanas.
Mientras que su exterior almenado guarda las apariencias militares, su interior tiene un estilo totalmente palaciego que mezcla elementos del gótico y el mudéjar. El impresionante patio clasicista de mármol blanco que alberga en su interior, fue construido en una reforma posterior en torno al 1600. Ciertamente, atesora gran cantidad de obras de gran valor y belleza. Actualmente es un parador nacional de turismo.
Iglesia Colegiata de la Candelaria.
Junto con el alcázar, es la otra gran obra monumental de Zafra. Fue construida en 1546 sobre las ruinas de otra iglesia que presidía la Plaza Grande. La Colegiata y su espléndido campanario sobresalen por encima de las casitas blancas y los tejados rojizos, viéndose desde una gran distancia y creando una imagen de auténtica postal.
Obviamente, lo primero que te llamará la atención es su colosal tamaño y su magnífica apariencia exterior, donde el gótico tardío se alía con el barroco y el estilo renacentista, embelleciendo sus portadas y la torre. Pero el interior es aún más espectacular si cabe, con un amplísimo espacio cubierto por bellísimas bóvedas de crucería estrellada con filigranas.
También te impresionará el retablo clasicista de la Virgen de los Remedios y sin duda pasarás un buen rato ante él, contemplando extasiado los nueve lienzos de Zurbarán que lo componen.
La Plaza Grande y la Plaza Chica.
Como corresponde al papel fundamental que siempre ha jugado el comercio en Zafra, las plazas eran espacios para los mercados, para el bullicio y el intercambio… Lugares donde la vida bullía e irradiaba hacia todas las partes de la ciudad.
La Plaza Grande, el centro neurálgico de la población, está rodeada totalmente por soportales.
Arcos de ladrillo sobre columnas de baja altura y cubierta de madera sostienen edificios de escasa altura construidos entre los siglos XV y XVIII.
Las palmeras que decoran la plaza no sólo la embellecen, sino que ofrecen un paradisíaco oasis en los días de verano.
La Plaza Chica, más pequeña y antigua, se conecta en la grande a través del llamado Arquillo del Pan y es uno de los lugares más históricos y representativos. Su encanto no te pasará desapercibido y si te dejas llevar puedes sentirte transportado a un mercado del pasado. En una de sus columnas aún puedes ver grabada la famosa Vara de Zafra, unidad que los comerciantes utilizaban para medir.
Más cosas que hacer en Zafra.
Obviamente, la riqueza monumental, artística e histórica de Zafra no se agota aquí. Sus callecitas de trazado medieval están repletas de rincones que te harán abrir los ojos como platos.
La judería zafrense y la antigua sinagoga; el magnífico Convento de Santa Clara, fundado en 1428; la famosa calle Sevilla, arteria comercial donde se mezclan antiguos comercios con las últimas marcas; iglesias, conventos, casonas, palacios y muchos otros testigos del paso de los siglos estarán contemplando tu mágico paseo por el casco antiguo.
Sierra del Castellar de Zafra.
El Camino Colorao te depara un paseo por el campo muy distinto a lo que podrías esperar. Y es que no sólo encontrarás la impresionante belleza natural de la montaña esperándote, sino un montón de inesperados tesoros ocultos desde hace miles de años en sus cimas: pinturas rupestres, restos arqueológicos y hasta un asentamiento islámico.
Lo que tienes que hacer en Zafra al fin y al cabo es muy sencillo.
Sólo recibir con los brazos abiertos todo cuanto tiene para ofrecerte. Ella sólo te pedirá un poco de tiempo para disfrutarla en calma y sin prisas y, a cambio, te recompensará.
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